¿Te imaginas que pueda estar en el espacio exterior y habitar una estación espacial que posea su propia gravedad artificial? ¿Gravedad artificial? Sí, como en esas películas de Star Wars o Stark Trek, donde los personajes caminan con total libertad, como si estuviese en el planeta Tierra.
Pues bien, la empresa Orbital Assembly Corporation (OAC), se ha trazado la meta de construir una estación espacial así. El nombre oficial de la estación sería Voyager Station. De momento, comparan ya su construcción con la estación que aparece en la película 2001: Odisea del Espacio, dirigida por Stanley Kubrick. La construcción iniciará, de acuerdo a los planes de esta empresa, desde el año 2025.
El medio voyagerstation.com es la web oficial desde la que se ha anunciado la naturaleza de este proyecto. Ahí mismo se confiesa con honestidad que se trata de un proyecto realmente ambicioso. La primera pista que se dio a conocer sobre este proyecto fue en el evento First Assembly.
Las acciones de este proyecto serán inicialmente de $0,25 dólares
En dicho evento, un grupo de veteranos en la industria espacial, afirmaron que se está trabajando con una financiación privada, que está abierta al público y en donde las acciones de este proyecto tendrán un valor de $0,25 dólares. En caso de que este proyecto se consolide, esta estación contaría con laboratorios científicos de investigación para multinacionales privadas.
Pero a su vez, se convertiría en el primer hotel en el espacio en toda la historia de la humanidad. Se estima que dada las dimensiones del Voyager Station, un total de 400 personas podrían habitarla cómodamente. Se estima que incluso podría tener conexión con otras naves espaciales, como lo sería el Starship de la compañía SpaceX.
Gracias a dicha estrategia, Voyager Station podría mantener un intercambio tanto de envíos de cargas científicas y recursos, como de pasajeros. El reto más importante que tendrían que afrontar las directivas de este proyecto, sería generar la gravedad artificial. El diseño que tendrá este proyecto se asemeja bastante a lo que sería un donut.
Un diseño cuya edad se remonta a 1929
Es importante indicar que el concepto del Voyager Station tiene más edad de lo que te imaginas. Sí, se logró ver reflejado en una película de Stanley Kubrick, en el año de 1968, lo que te podría llevar a pensar que este genio del cine logró adivinar que una estación así sería factible para generar gravedad artificial.
La verdad es que detrás del diseño que se presentó en esa película, existe una gran variedad de científicos. El concepto en realidad data del año de 1929. Fue un ingeniero de cohetes, el esloveno Herman Potočnik quien ya había ideado su diseño. Para el año de 1952, su idea fue perfeccionada por Willy Ley y Wernher von Braun.
Este último científico fue uno de los ingenieros nazi que pasó a ser parte de las filas de los Estados Unidos para aportar en el programa espacial de la época, debido a su gran experiencia en cohetes V2. Fueron estos mismos cohetes los que conquistaron a Londres durante la Segunda Guerra Mundial.
Garantizar la gravedad para todos los huéspedes de esta estación
De modo que fueron Willy Ley y Wernher von Braun, quienes estuvieron a cargo de cómo generar una gravedad artificial con el diseño de un donut espacial, que para entonces se estimaba podría tener un total de 72 metros de diámetro. Este proyecto, de hecho, es mejor conocido como “La Rueda de Von Braun”.
Y es que la fuerza gravitacional, surge precisamente de la fuerza centrípeta que genera la donut al estar girando sobre su propio eje. El eje central, al girar, se hace cargo de empujar a todas las cosas presentes en la estación. De acuerdo a ciertos estudios, la gravedad se aproximaría bastante a la presente en la Luna. Es decir, sería alrededor de un sexto de la gravedad vigente en la Tierra.
El tema de la gravedad artificial es vital dentro de este proyecto, ya que las condiciones de la gravedad espacial se hacen cargo de afectar tanto a los huesos como los músculos del ser humano. Tras un periodo de corto de 7 días, una persona que no se esté ejercitando en el espacio, sentirá al regresar al planeta una sensación muy abrumadora.
Sería una estructura con 51.104 metros cúbicos de espacio
Prácticamente, el efecto del espacio exterior, anestesiaría su cuerpo. De modo que si se espera crear un hotel espacial, es fundamental garantizar a los clientes que durante su estancia, la gravedad sea lo suficientemente digna para no vulnerar su “metabolismo” muscular y óseo.
El arquitecto Tim Alatorre, es quien ha diseñado por completo la estructura del Voyager State. La Orbital Assembley Corporation (OAC), mantendrá su fe en este diseño que está avalado por la fundación Gateway Foundation. En caso de concretarse este proyecto, estaríamos hablando de la primera estructura espacial más grande construida hasta entonces.
Y es que el diseño alcanzaría un total de 200 metros de diámetro. En total, la Voyager Station ostenaría hasta 51.104 metros cúbicos de espacio. Hasta ahora la Estación Espacial Internacional, que es la estructura espacial más grande que existe, alcanza un total de 916 metros cúbicos. En dicho espacio, todo está optimizado para la habitabilidad máxima de 7 personas.
Teniendo en cuenta las dimensiones del Voyager Station, al menos 316 personas podrán estar dentro de sus módulos. Se estima que en total se crearan 24 módulos, cuya dimensión sería de 20 x 10 metros. En materia de metros cuadrados, se estaría hablando de un total de 11.600.
Habrá que esperar hasta el año 2025… para que inicie su construcción
Si todo marcha bien, el proyecto comenzará a tener forma a partir del año 2025. Eso quiere decir por otra parte, que al menos pasarían 5 años antes de que terminará de crearse la estación. Algunos opinan que no acabaría de concretarse sino hasta el año 2040. Construir la Voyager Station no será nada fácil, tal como lo afirma John Blincow, un piloto comercial que se hizo cargo de establecer la Gateway Foundation.
La buena noticia es que la construcción se irá realizando a escala. Y esto permitirá ir observando los resultados a corto plazo. Cada vez que se optimice uno de los módulos, se podrá dar el paso siguiente. Cada módulo se irá conectando, verificando a su vez que todo marcha bien. De hecho, la empresa contará con una tecnología llamada Structure Truss Assembly Robot.
Se espera que esta tecnología logre construir espacios de hasta 90 metros en solo 90 minutos.